DIPUTADO MOLINA CORRALES
PIDE LEY MARCO PARA NEGOCIAR
TRATADOS DE LIBRE COMERCIO
El diputado Alonso Molina Corrales propuso, durante la realización del foro "Risaralda y el Proceso de Paz en Colombia", la aprobación de una ley que sirva de marco de referencia a los gobiernos, para negociar los tratados de libre comercio, y garantizar que esos acuerdos estén al servicio de los altos intereses de Colombia y no en beneficio de unas minorías privilegiadas.
El dirigente está de acuerdo con la revisión de aquellos tratados lesivos para el campo colombiano, que en su opinión debería ser abordado como un sector estratégico de seguridad nacional, con toda la protección del Estado.
El certamen que se cumplió en la tarde de pasado miércoles 21 de agosto, en la Asamblea Departamental, contó también con
las ponencias del ex Ministro de Gobierno y ex Gobernador de
Santander, Horacio Serpa Uribe, del Concejal de Pereira, Alvaro Escobar González y
la exposición de Jaime Mejía Gutiérrez, Docente e investigador de
la Escuela Superior de Administración Pública.
Lo
anterior como ejercicio académico programado por Alma Mater con la
participación de las universidades de Risaralda y la Asamblea
Departamental en respuesta a la propuesta de la Sociedad en
Movimiento que busca unificar insumos de debate regional como aporte
a los diálogos que con las Farc, adelanta en La Habana, Cuba, el
Gobierno Nacional.
Posterior
a la bienvenida y apertura del foro, a nombre del Presidente de la
Asamblea, Fernán Caicedo Cuero, quien destacó la importancia de
este acto desde el máximo recinto de la democracia en Risaralda,
fueron expuestas las ponencias que desde lo político y desde lo
académico, mostraron posiciones distintas de apreciar la discusión
que alrededor del tema agrario se adelanta en La Habana. Fue ésta,
una verdadera confrontación de modelos que debe servir como aporte
al debate que desde las regiones se vienen propiciando alrededor de
este tema de interés nacional.
PONENCIAS
El
Ex Ministro Horacio Serpa Uribe, valoró este esfuerzo que desde la
Asamblea departamental de Risaralda en asocio con las universidades
de la región quiere hacerse a los diálogos de paz e insistió en la
necesidad de actualizar el modelo actual de desarrollo del campo en
Colombia. Hizo un recuento de los intentos de reforma agraria en el
país, sin que hasta ahora se haya respondido verdaderamente a
encontrar la equidad social en el campo, dijo, al señalar la
perentoria necesidad de establecer subsidios que permitan al
campesino colombiano producir bajo condiciones de equidad y
bienestar social.
El
Diputado Alonso Molina, enfatizó su exposición en revelar las
condiciones adversas que en la actualidad hacen casi inviable la
producción agrícola en el país y particularmente la producción
cafetera en departamentos como Risaralda. Paradójicamente, dijo, hoy
el paro agrario ocupa las primeras páginas de los periódicos y se
convierte en un hecho inocultable de la realidad actual nacional. Una
Ley Marco para los tratados de libre comercio y un legislativo que
sea capaz de garantizar beneficios reales para nuestros productores,
a partir de estos acuerdos, propuso el corporado.
Por
su parte el Concejal de Pereira, Alvaro Escobar González, insistió
en la necesidad de conceptos claros alrededor de los términos de
población y territorio, como premisa para apuntarle a la equidad
social en el campo. No es en La Habana, donde debe definirse la nueva
política agraria para el país, afirmó, al sostener que este
escenario está deslegitimado por un régimen donde se violan las
libertades. A cambio, dijo, es urgente priorizar políticas de ayuda
y establecimiento de subsidios para hacer viable la producción
agraria y la dignificación de quienes trabajan la tierra,
puntualizó.
Finalmente,
el Profesor e Investigador de la ESAP, Jaime Mejía Gutiérrez, llamó
la atención sobre propuestas que logren contraponer en forma
pacífica y organizada la propiedad de la tierra e involucrar a
procesos de producción y defensa de áreas de protección natural a
quienes hoy quieren incorporarse a la vida civil en Colombia. Debe
ser la autonomía alimentaria una vía efectiva para procesos
libertarios, al referirse a modelos de reservas campesinas que con
claro criterio de beneficio común, le apunten a mejorar las
condiciones de explotación del campo colombiano.