lunes, julio 31, 2006

El Correo #21

Pereira, Junio 22 de 2006 # 21

BAGATELAS*
Periodismo para la memoria

Por Alonso Molina Corrales

Al revisar la lista de alcaldes de Pereira, como para prepararnos para la pretemporada electoral, encontramos que hace cien años la ciudad era orientada por la mano diestra del General Valentín Deaza Zamora, quién hizo su carrera militar al lado del Generalísimo Tomás Cipriano de Mosquera y participó como comandante, en todas las guerras emprendidas por el liberalismo radical del Siglo XIX.

Intervino con éxito en la guerra civil de 1861, que le dio a la Nación la constitución aérea de Rionegro y fundamentó el régimen del Olimpo Radical. Fue también protagonista de la batalla de los Chancos, con la cual el general Julián Trujillo aplastó la revuelta de los conservadores de Antioquia, contra la institucionalidad federal de la época.

De ahí en adelante, su suerte estuvo amarrada a la mala fortuna del liberalismo, desplazado por el huracán regeneracionista de Rafael Núñez, que lo alejó por cincuenta años del poder político.

No se sabe si fue por los constantes fracasos de los radicales en los campos de batalla o por ser víctima fulminante de la mirada fina de la señorita Apolonia Muñoz Buriticá, con quien contrajo matrimonio, que Deaza colgó en Pereira su espada y abandonó las botas, para ponerse el traje de paisano y asumir el papel de hombre cívico, en una de las pocas ciudades donde ser liberal no era pecado. Por eso se entiende que haya sido alcalde en 1906, 1907 y 1908.

Como servidor público y ciudadano comprometido, echó sobre sus hombros obras tan importantes con la construcción de la Catedral de Nuestra Señora de la Pobreza, destruida por un terremoto en el primer año de su mandato, la inauguración del cementerio y la construcción de la primera sede del Hospital San Jorge.

Igualmente, como cabeza del ejecutivo pereirano, protagonizó una de las primeras manifestaciones de inconformidad contra el centralismo manizaleño, cuando lideró una comisión que les exigió a las autoridades de Caldas un tratamiento equitativo para el resto de municipios de la mariposa verde.

Deaza nació Chocontá en 1851 y murió en Pereira en 1933, rodeado por el aprecio de sus conciudadanos y con su esperanza de católico renovada. Los cruentos años de guerra, al lado de sus camaradas ateos y masones, no le arrebataron su fe religiosa, de la cual daba muestras tangibles.

Cien años después de su mandato como alcalde de Pereira, bien vale la pena recordarlo y rendir tributo a su aporte como pereirano por convicción.

*”Bagatelas, periodismo para la memoria”, se emite en el boletín cultural de la Emisora Remigio Antonio Cañarte (97.7), los miércoles y viernes a las 5:00 de la tarde.
EFEMÉRIDES COLÓN: 500 AÑOS
Por Álvaro Zuluaga Ramírez*
El 20 de mayo, se cumplieron 500 años de la muerte de quien integrara al ámbito de entonces, para bien o para mal, el territorio que se conocería como el “nuevo mundo”: Durante muchos siglos, filósofos, teólogos y hombres de ciencia habían asegurado que la Tierra era plana como un disco y estaba limitada porun mar infernal que se extendía, al oeste, más allá del cabo Finisterre y del estrecho de Gibraltar, situados en los extremos occidentales del mundo conocido. Ese océano, afirmaban, no era navegable, y todo aquel que se aventuraba por sus aguas no regresaba nunca, engullido por sus terribles abismos o devorado por los numerosos monstruos que lo poblaban. Cristóbal Colón no fue el primero en creer que la Tierra era redonda, pues en su tiempo eran ya muchos quienes sostenían esta tesis. En todos los puertos europeos se contaban historias semilegendarias de hombres que habían atravesado aquel enorme mar y encontrado tierra al otro lado, por lo que no debía de ser imposible seguir su ejemplo y alcanzar por vía marítima el extremo oriental de Asia, tal como Marco Polo había hecho por tierra. Ese fue el propósito de Colón, quien no podía sospechar que entre Europa y las míticas Catay y Cipango (nombre que sus contemporáneos daban a China y Japón) había nada menos que un continente ignorado por todos. Este desconocimiento hizo que protagonizase la hazaña individual más importante de la historia de la humanidad aunque muriera sin tener conciencia de ello. Su interés científico se centraba básicamente en dos problemas, la naturaleza de los conocimientos geográficos que le llevaron a concluir que era posible un camino occidental hacia las Indias, y sus posibles contribuciones a la navegación. Giovanni Colombo y Susana Fontanarossa fueron los padres de Cristóbal, nacido en Génova en 1451. Las noticias sobre su juventud son escasas y de dudoso crédito, pues proceden en su mayoría de la “Historia del Almirante”, escrita por su hijo Hernando mezclando hechos verídicos con episodios fantásticos. Parece cierto que trabajó en el taller de su padre, tejedor de oficio, hasta que se hizo a la mar cuando aún no había cumplido los dieciocho años. Puesto que Génova era una importante ciudad-estado de gran tradición marinera, Cristóbal no tuvo dificultades para seguir su vocación ni para aprender las artes de la navegación y la cartografía, lo que hizo de un modo autodidacta. Existen documentos de numerosos viajes primerizos de Colón, entre los que destacan uno a Islandia, diversas travesías por el Egeo y varias expediciones comerciales a Flandes y Portugal. Allí contrajo matrimonio con Felipa Moniz de Perestrello, hija de un importante personaje en la corte portuguesa, lo que le abrió un buen número de puertas importantes. En 1485 se trasladó a España y se presentó en el convento franciscano de La Rábida; a aquellos monjes, vinculados a las islas Canarias y al mundo marinero, no les fue difícil poner al genovés en contacto con Alonso Pinzón, armador que le llevó ante el duque de Medinaceli, quien, a su vez, le dio dinero y una elogiosa carta de presentación para los Reyes Católicos. El resto de la historia es bien conocida por todos. El 20 de mayo de 1506, solitario y abandonado, muere en Valladolid llevándose a la tumba el mayor error de su vida: la creencia de haber alcanzado el Asia Oriental. *Director Ejecutivo de la Academia Pereirana de Historia.

LA COLUMNA DE MARULO

EL CABALLERO

Por: Edison Marulanda Peña

Se cumplen 100 años del nacimiento de un hombre de letras y estadista liberal, Alberto Lleras Camargo. Y aunque nadie lo pregunte hoy, confieso que por su prosa de humanista, inteligencia cultivada, probidad, austeridad en la vida privada y pública, es el colombiano por el que más respeto y admiración siento.

Hace pocos días la mesa directiva del Congreso encabezada por Claudia Blum, le hizo un homenaje en losa de mármol con su nombre y unas fechas (1906-1990). Lo honran los políticos por su condición de estadista, pero ignoran que la mejor manera de exaltar al escritor de talento es reproducir su obra.

Esto último lo hizo en vida de Lleras –en 1987- el entonces Presidente de la República Virgilio Barco Vargas, al decidir la publicación de las “Obras Selectas”, que comprenden 10 tomos y 3 grabaciones de piezas antológicas de su oratoria.

Transcribo un fragmento del perfil que Hernando Téllez, otro brillante intelectual de su generación, tituló EL CABALLERO y publicó el 4 de agosto de 1945. (Después Lleras Camargo fue 2 veces Presidente, fue el primer Secretario General de la OEA, fundó y dirigió las revistas Semana (Colombia) y Visión (México), recibió 3 doctorados Honoris Causa, el Premio de Periodismo Simón Bolívar categoría Vida y Obra, entre otros).

“(…) Ama la conversación y lo divierte el dislate o el ingenio ajenos (…); tiene pocos amigos íntimos y muchos amigos políticos y eventuales; con los primeros es menos frío, un poco menos cerebral que con los segundos; los últimos se sienten atraídos, seducidos por el espectáculo de esa inteligencia mordaz, razonadora, recursiva y esbelta; los otros, que también admiran principalmente esa “condición”, hallan adicionados su admiración y su afecto, por la rectitud del corazón y la clara lealtad.

“El caballero no es ambicioso de poder y, sin embargo ejerce el poder, lo ha ejercido en el pasado y lo ejerce ahora, con plenitud, sin proponérselo y, además, íntimamente fastidiado, ha sido Presidente de la República (…); hubiera no querido ser un político, sino un literato, pero la literatura se ha visto, en su caso, derrotada por la política; no le gusta mandar, y manda; no le gusta el ágora, la reunión multitudinaria y estruendosa, y en el ágora vive; le complacería desenvolver su existencia frente al sol campesino, por entre los tranquilos bosques de pinos y de sauces de su amplio valle natal o entre los altos muros de una biblioteca por cuyos ventanales entrara la luz a raudales y por ellos se pudiera ver el sereno paisaje de unas cándidas colinas o de unos sembrados de trigo; pero ha de vivir entre el tempestuoso mar urbano de la política (…).

“Las gentes dicen que no es simpático y que hay algo en él de recóndito que enfría el ademán, el ímpetu cordial, la caliente espontaneidad; de pronto se le hiela la sonrisa en los labios y sobre la frente aparece una dura raya vertical y en los ojos brilla una luz lejana: está pensando en otra cosa, distante, vaga, ajena al tema del interlocutor. El interlocutor se siente defraudado y molesto. La simpatía, en efecto, no es una condición de la inteligencia sino del temperamento (…).

“Un día escribió: ´Yo no tengo mérito en mi pobreza y ésta me importa una higa´. Orgulloso hasta los tuétanos, no vanidoso, esta frase que parece de un hijo de Esparta, denuncia su cartesiana convicción de que sólo la inteligencia es poderosa y sólo ella puede ofrecer y ofrece las mejores y más altas compensaciones a un espíritu recto.

“Cuando las tareas del poder político cesan eventualmente, avanzada la noche, el caballero vuelve a su casa; cae entre los amplios brazos fieles de una silla y se pone a leer un bello libro de poemas, una hermosa novela, un precioso tratado de historia…el caballero se llama Alberto Lleras”.

EVENTOS

Semana del cine independiente

El Cine Club BORGES, ubicado en la Carrera 8 No 27- 47, ha organizado entre el viernes 23 y el jueves 29 de junio, la Semana del Cine Independiente, en horarios de 3:45, 6:30 y 9:30 p.m, con las siguientes cintas:

Viernes: ANTES DE LA LLUVIA
Sábado: REQUIEM POR UN SUEÑO
Domingo: EL ULTIMO BESO (a las 3:30 hay cine infantil)
Lunes: EL JUEGO DE LAS LÁGRIMAS
Martes (a las 6:30 p.m.): PARIS FRANCIA
En horario de los clásicos vea CASABLANCA (3:45 y 9:30 p.m.)
Miércoles: ¿QUÉ HACER EN CASDO DE INCENDFIO?
Jueves: LA PISCINA
A las 6:30 vea Doberman

AGRADEZCO EL REENVIO DE ESTE MATERIAL Y LA PRESENTACIÓN DE NUEVOS CORRESPONSALES. TAMBIEN ESPERO COMENTARIOS Y APORTES PARA ENRIQUECER ESTE CORREO Y ESTE DIÁLOGO.

alonsomolinacorrales@yahoo.com

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicitaciones por su blog. Me gustaría saber donde puedo encontrar información sobre el general Valentín Deaza. Gracias